Descripción del producto
Entrando en la plataforma para predicar esa mañana, admití que no era un pastor primero, sino un tipo regular, asustado, inseguro, cotidiano cuya vida había sido cambiada por Jesús.
Y si Jesús realmente me amaba como yo era (yo sabía que lo hacía), entonces:
¿Por qué debería seguir tratando de ser alguien que no era?
¿Por qué fingimos tanto?
¿Por qué pasamos tanto tiempo tratando de complacer a todos los demás y hacer tan poco esfuerzo por agradar a Dios?
Cuando Craig Groeschel se hizo estas preguntas, no pudo encontrar una buena respuesta. Así que un día decidió rendirse y empezar a ser real. Con esa opción única, su vida comenzó a cambiar en gran medida.