Descripción del producto
Durante cientos de años Latinoamérica ha sido considerada cristiana por sociólogos y cartógrafos. ¿Por qué, entonces, la mayoría de la sociedad latinoamericana no refleja el poder transformador del evangelio en sus relaciones, instituciones y gobiernos? ¿Acaso es porque el evangelio verdadero y sin diluir no ha sido abrazado por la mayoría de los cristianos latinoamericanos? ¿Qué se puede aprender al mirar a Estados Unidos en sus períodos de fidelidad e influencia evangélica, y más recientemente, en el declive y la degeneración de su vida espiritual?
En este libro el Dr. Núñez provee una visión de amplia gama. La iglesia no solo es llamada a predicar el evangelio (¡aunque sí es llamada a hacerlo!). La iglesia no debe solo enfocarse en plantar nuevas iglesias (¡aunque sí debe hacerlo!). Como pueblo redimido por Dios en un mundo caído, tanto la iglesia (y las iglesias) como los individuos cristianos deben ser la sal y la luz que permean la sociedad con el poder transformador del amor de Dios en Cristo.
Cuando la Palabra pura de Dios es predicada, creída, vivida y compartida, ¡vemos efectos asombrosos en los individuos, las iglesias y las sociedades! Podrías estar pensando: Sí, estoy de acuerdo, pero ¿cómo exactamente se ve eso? ¿Puedes respaldar lo que dices con la Biblia? ¿Puedes ilustrarlo con estudio histórico? ¿Puedes darme datos específicos, tal vez hasta un ejemplo detallado de una iglesia fiel que ha seguido exitosamente este modelo de transformación centrada en el evangelio? . En este libro el Dr. Núñez responde precisamente a esas preguntas.